659 kilómetros

miércoles, 2 de junio de 2010

y van ya...

Otro blog que abandono. Con los blogs soy peor que con los propósitos de año nuevo. Me duran lo justo.

miércoles, 28 de abril de 2010

icono inútil

El mundo se divide entre los que creen que el exprimidor-araña de Philippe Starck es uno de los objetos mejor diseñados de la historia y los que lo consideran como algo muy estético pero poco práctico. Estos dos grupos no coinciden con otros dos grupos en los que también podemos dividir el mundo: los que tienen uno de estos ítems en su casa y los que no. Los que sí lo tienen se dividen entre los que lo utilizan, que son los menos, y los que no. Éstos últimos sí que suelen pertenecer a una de las primeras subdvisiones que he mencionado: las de los que creen que el exprimidor-araña es más decoración que utensilio de cocina. Yo soy uno de ellos. Y me siento un poco gilipollas haciendo mi zumo de naranja de todas las mañanas a mano, tras cargarme el exprimidor cutre que sí usaba. Mientras el otro sigue ahí, en su estantería, disfrutando de su estatus de icono del diseño moderno absolutamente inutil.



domingo, 25 de abril de 2010

mens sana in corpore sano (in nice clothes)

La estética deportiva conquista la ropa de calle, mientras que la ropa deportiva corre el riesgo de ser cada vez menos estética. Muchos pasamos bastantes horas al año corriendo, nadando, practicando yoga, en el gimnasio... y estoy seguro de que hay mercado para las prendas deportivas que sepan conjugar lo práctico con lo estético. Aunque también es cierto que cuesta invertir dinero en cosas que van a terminar inevitablemente empapadas de sudor. Sin embargo, si somos capaces de gastar bastante dinero en prendas que utilizaremos como mucho una vez cada quince días, quizá deberíamos pensar que nos merecemos unas buenas (y bonitas) mallas para correr o una sudadera para después de los entrenamientos en el gimnasio. Líneas como la de Nike (sobre todo Nike Women, relanzada gracias al talento de Kristina Szasz, que luego haría algo parecido, pero para hombre, en Dockers) demuestran que esto es posible. Otros casos, como los de las horrendas cosas que diseña Stella McCartney para Adidas, nos muestran que la intersección entre moda y deporte no es tan secilla. A veces es una fusión artificial, como las de Bikkembergs o D&G, más enfocadas hacia el fetichismo de la ropa deportiva que a la práctica del deporte en sí misma. De cualquiera manera, lo que está claro es que hay espacio para nuevas propuestas interesantes.

viernes, 23 de abril de 2010

en busca de la mochila perfecta


Las zapatillas del gimnasio, la pantalla de vídeo portátil, las chancletas, las gafas, las otras gafas, la carpeta de clase, una manzana, una novela... todo esto y más es lo que puedes encontrar en mi mochila un día cualquiera. Admiro a los que van por la calle sin nada, sin mochila ni bolsa. Imagino que no tendrán que cargar con nada. Yo sí tengo que hacerlo y llevo años intentando encontrar el contenedor perfecto. He explorado todas las opciones, tanto en forma (mochilas, messengers, shoppers...) como en procedencia-precio (Eastpak, Y-3, Nike, Prada, Manhattan Portage...). Las aburridísimas (pero prácticas y de una calidad inigualable) bolsas y mochilas de Tumi siguen siendo las que mejor puntuan, pero son tan... adultas. Me quedan por explorar pocas opciones, pero no desisto. Ahí fuera, seguro, está la mochila perfecta para mí. Sólo tengo que encontrarla.

jueves, 22 de abril de 2010

gafas y sotanas

El otro me topé (literal: volvía de clase y ahí estaba, justo al lado de casa) con una fiesta de presentación de las gafas de DSquared2. Seguramente los enanos, perdón, hermanos, Caten, los 2 DSquared, estaban en el evento (El que si estaba, lo vi, era el padre Apeles, en fin). No me pueden caer peor estos dos, no puede desgradarme más su estética, pero admiro su capacidad para encontrar su nicho de mercado, de localizarlo, nutrirlo y hacerlo crecer. Su reivindicación de la horterada y los tópicos italianoides y filogays tendrá sentido para algunos, pero no para mí. La reinterpretación de la vulgaridad es, en su caso, tan obvia que igual ni siquiera es real. El Versace de los ochenta y noventa no disfrazaba de putas a las señoras, sino a las putas de señoras. Más o menos. Que sea caro no quita para que siga siendo una horterada. DSquared2 hacen un poco lo mismoy visten a sus clientes de celébrities basura, de caricaturas porno, de chaperos, de dibujos animados hipersexuados y baratos. ¿Tendrá el padre Apeles algo suyo?

martes, 20 de abril de 2010

suma y sigue

Minutos. Eso eslo que están durando las cosas en la venta online de los stocks de Maharishi y MHI. Menos mal que yo fui decidido y me hice con mi helmet bag enseguida. No sé dónde voy a meter tantas bolsas y tantos zapatos. Quizá debería devolverlos al mercado, venderlos en Ebay, recuperar el coste, ganar dinerito con ellos incluso. O poner un restaurante temático, o un museo. ¿Hay algo más patético que no utilizar las cosas que compras? Es tan decadente, tan grosero incluso. Pura decadencia occidental. Pero a la vez es tan difícil no enamorarse de algunos objetos, resistirse a la tentación de poseerlos. ¿Menos es más o más nunca es suficiente?

jueves, 15 de abril de 2010

los náuticos

No pienso ponerme unos náuticos nunca más. Been there, done that. No voy a entrar en el juego de lo que vuelve, lo reinterpretado, el revival. Esta vez no. Entiendo perfectamente que los que vivieron en sus carnes la estética de los ochenta se nieguen a jugar ahora a los disfraces ochenteros, a los cortavientos de plastiquillo, a los colorines. Been there, done that, worn that. Yo ya llevé náuticos en su momento, no tengo por qué volverlo a hacer. Aún así, me divierte (y me alegra) ver el relanzamiento de firmas como Sebago. ¿Para qué importar el preppy americano si aquí tenemos el nuestro? ¿Por qué dejar que sean Ralph y Tommy los que partan la pana (y el tartán), cuando aquí podemos hacerlo igual de bien?