Más que la moda en sí, es el estilo la última obsesión. El estilo, el estilo… ¿qué es el estilo? ¿Dónde está? ¿Sirve para algo? Ya no se trata de tener la mejor ropa, la más buena o la más cara, sino de tener estilo. De “saber llevar” la ropa, ya se trate de un poncho de plástico hecho con una bolsa de Mercadona o un traje de Tom Ford. “El estilo no se puede comprar”, “o se tiene o no se tiene”, dicen, lo cual hace que el asunto sea mucho más estresante. Los blogs de street style han acelerado el fenómeno, y han creado nuevas estrellas, que fotografían y/o se dejan fotografiar allá donde van. Y van a muchos sitios. Como todo, esto tuvo una eclosión, una expansión y un auge. Ahora tocan quizá estamos en la fase de saturación o tal vez en la de decadencia. Y yo, que siempre llego tarde a todo, aún no he fotografiado nadie, ni nadie ha querido hacerme una foto a mí. Igual no tengo estilo. A lo mejor es eso.
domingo, 28 de febrero de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
7 comentarios:
en el caso de Cecilia Dean, es obvio: ella tiene estilo!, un estilo inteligente
Comparto la saturacion de streetstyle.
Y respecto a lo de estilo no puedo estar más de acuerdo llevar un prenda barata y darle valor, o realzar el de cualquier otra.
Ahi esta el merito, la gracia, el encanto.
La saturación ya fue, ahora es la desaturación. Bye bye
no puedes tener más razón. No importan tanto las tendencias como saber llevar la ropa, combinarla y sacarle todo el partido, sean de la temporada que sean.
Un abrazo,
Jose
cuanta razón tienes
hay muchísima saturación
aunque por lo menos a mí me encanta
buscar buenos outfits, y gente que tiene estilo, o algo especial (no se si llamarlo estilo o como llamarlo) pero de los 58091735 blogs y fotos que hay, hay pocos en condiciones
♥
http://marleymumbles.blogspot.com
Lo cierto es que el mundo del street style por un lado les ha quitado el bastón de mando del estilo (el estilo, el estilo, ¿qué es el estilo?)a los cuatro de siempre, pero por otro le ha dado bola a todo un ejército de pijo-hippies de pacotilla, dandies de garrafón y putarracas con complejo de estrella pop-burlesque. Es decir, que huyendo del concepto del fashion victim, se ha caído aún más en él, ¿no os parece?
una observación muy buena. La moda es como un terreno de todos y para todos, donde todo el mundo o cualquiera puede aparecer como un especialista. Pero para un profesional de la moda, a menudo esta banalización se convierte en un incordio, casi en un obstáculo para mantener la profesión como tal. Una cosa es saber ponerse mono y stylish (que tiene su mérito!) y otra bien distinta es el conocimiento profesional. dos cosas que no siempre coinciden!
Publicar un comentario